Y el domingo estuvimos en Masaya y alrededores.
El puente avanza rápidamente otra vez.
La semana siguiente nos fuimos el lunes de vacaciones. En el barco me informan de que la alcaldía está empezando a hacer su trabajo, aunque surge un problema de precios que tenemos que solucionar por teléfono. A continuación copio el diario de vacaciones de Sara:
LUNES 7
Salida en carro con Luis Manuel como chofer, de la Zona a las 11 de la mañana. Dejamos a Rubén atrás (porque llega más tarde y nosotras salimos antes de lo previsto). En Granada sacamos los boletos a S. Carlos, después aprovechamos para pequeñas compras y recaditos de última hora (por el mercado, peluquería, etc.).
Corre que te corre nos disponemos a agarrar el barco a las 2 (pensamos que lo perdíamos). Subimos a la planta alta –clase preferente- y amarramos hamacas para después deleitarnos con un buen embutido de la Chayito. Digamos que montamos el campamento en medio, y nos perfumamos con vinagre blanco para ahuyentar zancudos (y demás bestias…).
Pláticas, risas, conocer a otras/os chelas/es… así pasamos las horas en el barco, disfrutando de las vistas que nos brindaba la travesía por el lago Cocibolca.
Paradas en Ometepe (Mollogalpa), Morrito, S. Miguelito, etc. Cada vez se notaba más la presencia de los zancudos.
Bajo la luz de la luna y las estrellas pasamos una noche fresquita (algunas pasaron más frío que otras, es decir, pasaron bastante frío).
MARTES 8
Llegada a S. Carlos a las 5:30 de la mañanita. Y nos ponemos a tono con un café calentito.
Tras el cafecito cerca del puerto, pues había que ponerse a tono después de la nochecita fresquita. Eran las 5.30 de la mañana y nos disponemos a explorar San Carlos, después de habernos informado de que hasta la 1 de la tarde no saldría el colectivo para Solentiname, y de que Alicia (nuestra negociadora oficial) nos hubiese encontrado una lanchita de regreso para el día siguiente. En las horas que pasamos allí, visitamos: un mirador,
una panadería a la cual nos condujo el olor que se extendía por las calles en nuestra búsqueda de un lugar para desayunar; un centro cívico puesto en marcha por el gobierno de Euskadi, con información sobre la historia del Río San Juan (más centrada en las conquistas española y los piratas ingleses que en sus pobladores originarios), desde lo alto del mismo se podía contemplar una hermosa panorámica del río y su unión con el lago (allá pasamos largo rato meditando, echando la siesta…); un restaurante cerca del muelle donde tardaron siglos en servirnos la comida y pensábamos que perdíamos el barco (eso sí, eran unos platos de comida suculenta y cocinada con mucho amor, pero para comer tranquilamente…).
Tomamos la lancha colectiva que viajaba al archipiélago de Solentiname
1 comentario:
Pero que guapas estais. Os estamos siguiendo desde Livingstone, a puntito de marchar para Namibia. Los tiritos del anho pasado nos sirvieron de practica para el pedazo de puenting que hemos hecho este anho (Visite nuestro blog), y ya vamos como profesionales para tirarnos al Ochomogo. Muchos besos de las tres ches en namibia, y que sigais disfrutando y todo vaya rodando.
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